El Gran Premio de Gran Bretaña de Fórmula 1 dio para todo: escándalo, emoción, rivalidad y un nuevo formato que genera dudas.
Por: Esteban Hernández
Quiero ser sincero, no fui capaz de escribir el domingo al finalizar la carrera, ¿por qué? Tenía la sangre caliente, como muchos, y temía que esta situación terminara nublando mi juicio con respecto a todo lo que vimos este fin de semana durante el Gran Premio de Gran Bretaña en la Fórmula 1.
Creí que hoy les iba a hablar acerca de mis anotaciones con respecto al nuevo formato de clasificación sprint que se dio a conocer durante el fin de semana, pero bueno, Max y Hamilton se llevaron todas las miradas. Hace muchos años no veía, en mi entorno, a tanta gente opinando sobre Fórmula 1. Soy colombiano y del 2001 al 2006, por Juan Pablo Montoya, se respiraba automovilismo en mi país, pero de ahí en adelante llegó el silencio. Creo que no veía tanta opinión desde la tragedia de Schumi de hace ya 7 años.
Para comenzar a hablar del accidente de estos dos titanes, me gustaría tratar de entender un poco el contexto. Red Bull venía de ganar 5 carreras consecutivas, de las cuales 4 las ganó Verstappen, y eso que no fueron todas debido al incidente con los neumáticos en Bakú. ¿Qué habrá sentido durante estos casi dos meses Lewis Hamilton? Era la racha sin victorias más grande que había tenido Mercedes desde 2013, justo cuando el mandamás de la F1 era Red Bull. No debe ser fácil ser siete veces campeón del mundo y sentirse superado en pista por un chico de 24 años.
Por otro lado, Mercedes llevó un paquete de actualizaciones a Silverstone que los ayudó a achicar la brecha con sus competidores, tanto que Hamilton fue el más rápido del viernes. Creo que ambos pilotos se habían respetado en exceso hasta este momento, no están jugando, no es un videojuego, están disputando el mundial de pilotos. Lewis necesitaba recordárselo a Max.
El accidente
Inició la competencia, Max llegaba primero a la curva 1 con un Hamilton muy combativo. El inglés trató de encontrar espacio en las siguientes curvas sin éxito. En la recta Wellington y que precede a la curva 6, se puso lado a lado, tanto que lo rebasó, pero Max conservó la cuerda interna, fue agresivo y mantuvo el primer lugar al salir de la 7, cerrándole fuertemente la línea. Creo que ese momento fue el detonante para lo que vendría después.


Seguramente, ese primer encuentro calentó los ánimos de ambos, especialmente el del inglés que no se iba a dar por vencido en casa. Es así como en la siguiente recta y que antecede a Copse, una de las curvas más rápidas del calendario, Hamilton aprovecha la succión de Verstappen, le mete el carro por dentro.


Y lo que todos sabemos. Max quedó por fuera de la carrera y Hamilton continuó en carrera para, en un final emocionante, alcanzar su victoria número 99.
Las claves
- La sanción: 10 segundos a Lewis Hamilton que cumplió en boxes. Parece injusta, pero se aplicó lo que el reglamento dicta.
- ¿Intento de homicidio? Max Verstappen golpeó la barrera de seguridad a casi 200 kph y su cuerpo experimentó 51 G de desaceleración. ¡Es un milagro que saliera caminando! Sin embargo, creo que es un señalamiento bastante drástico, en esta curva se han visto grandes adelantamientos como el que le hizo Vettel a Alonso en 2013. Y como ese, muchos, entre ellos el que Hamilton le hace a Leclerc al final de la carrera.
- La bandera roja: evidentemente favoreció a Hamilton, pero no es reprochable a la dirección de carrera, ya que el accidente Max rompió la barrera de seguridad, la debía reparar e ingresaron grúas y ambulancias al lugar del accidente. Fue una decisión sensata.
- ¿Desmedida celebración de Hamilton? Muchos lo juzgan por celebrar tras mandar al hospital a Max. Ganó en casa y el holandés estaba fuera de peligro y sin lesiones. También pienso que el inglés podía celebrar, otro sería el caso si el accidente hubiera terminado en otras circunstancias, pero por suerte, no fue el caso.
- ¿Es comparable el accidente con el de Senna y Prost en Japón 1990 o el de Hill y Schumacher en Australia 1994? Considero que de ninguna forma. En estas ocasiones, el que provocó el accidente era el líder del campeonato en su respectivo momento, Senna y Schumacher. Ambos sabían que, si eliminaban al otro de carrera, serían campeones mundiales, sin importar su propia suerte. En este caso, Hamilton se arriesgó a salir con Max y, de ninguna forma, le hubiera significado algo positivo para el campeonato. Un toque a 300 kph podía dejarlo, tranquilamente, fuera de carrera, por eso considero que no hubo mala intención con el holandés.
Al final, y después de conversarlo, ¿el accidente es culpa de quién? La dirección sancionó a Hamilton por quedar en carrera, pero considero que ambos son culpables, ambos fueron al límite en apenas la primera vuelta. Max muy agresivo giró como si estuviera solo, esperando a que Hamilton frenara como lo había hecho ya en otras carreras.
Por su parte, Hamilton llegó sin radio de giro a la curva y no frenó lo suficiente, la fuerza centrífuga hizo lo suyo, empujar el auto hacia el exterior, lo que terminó ocasionando el toque. ¿Los culpo? No, son dos grandes pilotos que tienen hambre y que incrementan su rivalidad. La Fórmula 1 necesita espectáculo, se alimenta de él y en Gran Bretaña se vio. La gente lo pedía y hoy no puede reprochar la mejor rivalidad que hemos tenido en los últimos 13 años, diría que después de la de Massa y el mismo Hamilton en 2008.
Anotación: clasificación sprint
Personalmente, no le tenía fe a este formato, pero nos permitió ver más acción este fin de semana. Cambiando una práctica 3 que suele ser muy aburrida por una mini carrera que decide puntos y puestos de salida. Tras finalizar la primera carrera sprint, siento que dejó buenas sensaciones, aunque a los que votaron en mi publicación, al parecer no. En Gran Bretaña, la Fórmula 1 mostró una nueva cara.