El pasado 29 de Noviembre leo Messi consiguió su séptimo Balón de Oro, lo que causó revuelo en los aficionados del deporte. ¿Realmente lo merecía?
Por : Santiago Mejía
El año deportivo del argentino comenzó en el Barcelona, donde marco un legado y se formó como uno de los mejores futbolistas de la historia, pero, la campaña 20/21 fue para el olvido, ya que no consiguió sus objetivos individuales ni colectivos. Hace un par de temporadas el diez coqueteaba con diferentes equipos del continente europeo, meses después esto se haría realidad.
A mitades del año, Argentina ganó la Copa América en suelo brasileño frente al anfitrión del torneo, suceso que catapultó al argentino a ganar el Balón de Oro, y con esto, la competición suramericana gano más prestigio frente a los ojos de los fanáticos mundiales del deporte balompié. El nacido en Rosario fue pieza clave en los partidos de su seleccionado.
El 10 de agosto se hizo oficial la llegada de Messi al PSG, causando fiesta en las calles francesas, esto debido a que era la ficha que faltaba en el rompecabezas. Hasta el momento acumula 6 goles en 16 encuentros, dejando mucho que desear en sus fanáticos, sumándole además que es un mal promedio para el recién ganador del premio individual más importante del ambiente futbolero.
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Aunque a Leo Messi aún le falta acoplarse a la ciudad y al club, su nivel futbolístico este año estuvo por debajo de los anteriores, agregando que la Copa América fue un factor fundamental para que el jugador de 34 años fuera el protagonista a llevarse la presea, lo que quiere decir que, en menos de 10 partidos con su seleccionado se “desatraso” de lo que no consiguió con sus equipos.