En medio de la sorpresiva derrota de Argentina, también es necesario recalcar los puntos altos de la victoria de Arabia Saudita.
Por: Sebastián Arboleda.
Tras la inesperada caída de la ‘albiceleste’ se han empezado a sacar conclusiones de todo tipo; la falta de ideas, el susto por parte de los debutantes e incluso el mal planteamiento de Scaloni. Pero lo que todos han dejado de lado es la táctica arriesgada pero fructífera que le ha otorgado la victoria al equipo correspondiente a la confederación asiática.
Los dirigidos por el francés Hervé Renard apostaron a adelantar sus líneas desde el primer momento, contando con su zaga defensiva casi que en la mitad del campo, dejando una diferencia de casi 40 metros entre los defensas y el portero. Dicho adelantamiento le permitió sumar volumen en la parte media del terreno de juego, lo cual hizo que la presión sobre los sudamericanos fuera mayor y les permitió cortarle el ritmo de juego a los argentinos.
Pese al riesgo que tomaron con sus líneas adelantadas, la zaga supo compenetrar y coordinar muy bien sus movimientos, ya que gracias a sus anticipaciones pudieron ser anulados los otros tres goles que hicieron los ‘gauchos’ durante la primera parte.
Otro aspecto importante fue la eficacia de sus atacantes, que con tan solo dos oportunidades de gol lograron materializar dos tantos. Luego de remontar el partido a su favor, supieron tener el control de la defensa y nunca tuvieron un peligro real sobre un posible empate, también dado por la falta de fundamentos por parte de los argentinos.
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En reglas generales, la táctica de Arabia Saudita funcionó adecuadamente y lograron sorprender al mundo con una inesperada victoria sobre una de las selecciones candidatas a quedarse con el mundial. Los árabes esperarán mantener su ímpetu en su próximo juego ante Polonia el 25 de noviembre.