La primera división del fútbol colombiano vivirá una transformación a partir del próximo año, con un calendario sin fecha de clásicos, nuevas fases finales y ajustes en la inscripción de extranjeros.
La Liga BetPlay 2026 marcará un antes y un después en la estructura del balompié colombiano. Este jueves 11 de diciembre, la Dimayor aprobó una serie de modificaciones que buscan modernizar el campeonato y adaptarlo a necesidades logísticas, comerciales y deportivas. Entre las decisiones más llamativas se encuentra la eliminación de la tradicional fecha de clásicos tanto en el primer como en el segundo semestre, un cambio que rompe una costumbre arraigada durante años en el calendario del FPC.
Para el primer semestre, denominado Liga BetPlay 2026-I, el campeonato tendrá 19 fechas en su fase regular, con clasificación a playoffs. Con este ajuste, todos los equipos se enfrentarán una sola vez, lo cual otorga mayor equidad al torneo y evita los dobles emparejamientos históricos que solían generar debates entre hinchas y dirigentes. Los ocho mejores avanzarán a la fase decisiva, manteniendo el formato habitual de cuartos, semifinales y final.
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En el segundo semestre, la Liga BetPlay 2026-II repetirá el formato de 19 jornadas, pero su fase final será distinta: regresarán los cuadrangulares semifinales, un sistema que ha estado en el ADN del fútbol colombiano y que suele generar emoción, asistencia masiva y alta competitividad. Los cuatro ganadores de grupo se medirán en la gran final para definir el campeón del año.
Otro cambio relevante aprobado por los clubes tiene que ver con la participación de futbolistas extranjeros. A partir de 2026, los equipos podrán alinear en cancha a sus cuatro jugadores extranjeros inscritos, sin limitaciones adicionales, una medida que busca elevar el nivel competitivo y permitir mayor flexibilidad táctica a los entrenadores.
Con estos ajustes, la Dimayor apuesta por una Liga más dinámica, pareja y atractiva para el aficionado. El 2026 será un año de transición y expectativa, donde cada jornada tendrá un peso determinante y donde el fútbol colombiano volverá a reinventarse en busca de un producto más sólido y competitivo.