El carismático y siempre sonriente “Chavito”, anunció su retiro profesional tras 16 temporadas dejando huella en las carreteras de Europa. Con un palmarés histórico y una forma de competir que enamoró a los aficionados del mundo, el bogotano pone fin a una carrera tan brillante como inspiradora.
Chaves, de 35 años, fue durante más de una década uno de los escaladores más respetados del pelotón internacional. Su irrupción se dio temprano, cuando conquistó el Tour de l’Avenir, el mismo que anuncia a las futuras estrellas del ciclismo. Desde entonces, su progresión fue constante y memorable. En 2016 firmó la mejor temporada de su vida: subcampeón del Giro de Italia, tercero en la Vuelta a España y protagonista absoluto de las grandes vueltas. Ese mismo año, además, escribió su nombre en la historia al convertirse en el primer colombiano en ganar uno de los cinco monumentos del ciclismo: el Giro de Lombardía.
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A lo largo de su carrera, Chaves también superó lesiones, caídas durísimas y momentos de incertidumbre, pero siempre regresó con su sello inconfundible: una sonrisa franca y una mentalidad resiliente. Fue campeón nacional de ruta y defendió los colores del país con orgullo en los grandes escenarios, dejando una huella imborrable en equipos como Orica, Mitchelton y EF.
En su despedida, ‘Chavito’ habló desde la serenidad y la gratitud: “La decisión es la correcta. Estoy muy feliz y muy orgulloso de la carrera deportiva que tuve. ¿Quién soy sin la bicicleta? Soy Esteban: hijo, hermano, esposo, padre. Un ser humano que sueña con dar ejemplo, estar en paz y vivir en contacto con la naturaleza”.
El retiro de Chaves marca el final de una era para el ciclismo colombiano, pero también el inicio de una nueva etapa para un hombre que, más allá de los triunfos, inspiró a generaciones enteras. Su legado queda escrito en las montañas, en los podios y en el corazón de todos los que alguna vez vibraron con su inagotable espíritu.