James Rodríguez escribe su nombre en letras doradas en el libro de las Eliminatorias sudamericanas. Con las dos asistencias que entregó en la goleada 6-3 de Colombia sobre Venezuela en Maturín, el 10 de la Tricolor alcanzó 15 pases de gol en la historia del torneo clasificatorio, cifra que lo ubica como el segundo máximo asistidor de todos los tiempos.
El mediocampista superó a Lionel Messi, quien había llegado a 14, e igualó la marca del chileno Alexis Sánchez. Ahora, solo le queda por delante Neymar Jr., quien domina el escalafón con 19 asistencias. James quedó a apenas cuatro habilitaciones de igualar el récord absoluto, un logro que refleja la vigencia y la trascendencia de su talento en el fútbol sudamericano.
Desde su irrupción en la Selección Colombia, James ha sido el motor creativo del equipo. Sus pases filtrados, su precisión en balones aéreos y su capacidad para leer los espacios han marcado diferencia en partidos decisivos. En estas Eliminatorias rumbo a 2026, además de liderar la tabla de asistencias, reafirmó su rol como conductor del conjunto dirigido por Néstor Lorenzo.
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No obstante, la incógnita ahora pasa por el futuro. Con 33 años, el cucuteño pudo haber disputado en Maturín su último partido de Eliminatoria, dependiendo de lo que ocurra con su continuidad en la Selección y de su estado físico rumbo al próximo proceso clasificatorio.
Más allá de lo que depare el destino, el legado de James Rodríguez ya está asegurado: el 10 cafetero es uno de los futbolistas más influyentes de la historia de las Eliminatorias sudamericanas, un creador que llevó a Colombia a nuevas alturas y que dejó huella en el continente con su visión y su calidad.